El ejercicio al aire libre ha aumentado un 80 % en comparación con los años anteriores a la pandemia, y los mayores incrementos son el senderismo y los paseos por la ciudad. Otros deportes al aire libre que también han aumentado sus índices de participación son: jogging en un 60% y ciclismo en un 50%. Asumiendo que los expertos aconsejan no abandonar del todo los hábitos deportivos durante las vacaciones, para no perder lo ya hecho en el año, ¿qué podemos hacer en verano para que el calor no sea una excusa y la pereza nos invada?
Como recomienda el Plan Nacional de Acción para Altas Temperaturas, en primer lugar, «debemos limitar nuestra exposición al sol, evitar los deportes al aire libre a la mitad del día y usar ropa ligera y holgada». En este sentido, la coordinadora autonómica del Camp de Tarragona en la Facultad de Fisioterapia de Cataluña, Cristina Adelon, señala que “las altas temperaturas estivales pueden provocar graves problemas de salud como deshidratación, golpe de calor, desmayos, convulsiones, etc. razón por la que es necesario tener mucho cuidado, especialmente en el verano. En este sentido, una buena hidratación es fundamental. “Muchos países incluyen, entre sus recomendaciones dietéticas, el consumo de una determinada cantidad de líquido, especialmente agua, entre 1,50 y 2,50 litros por día, menos de 8 tragos por día, en climas templados; y beber, aun cuando no se tenga sed , porque este mecanismo suceden cuando realmente comienza la sequía”. ir a la playa
Por lo que continúa explicando, “Hacer ejercicio en la playa puede alejarte de la vida cotidiana, y obtener la ‘sensación de libertad’ que da hacer ejercicio al aire libre, en un ambiente diferente. (Ejercicio en la ciudad o en el gimnasio), con una temperatura agradable, suavizada por la brisa marina o la vista del agua, siempre que sea en las horas menos soleadas».
Entre las ventajas de correr en la playa se encuentran “elimina el estrés por el contacto directo con la naturaleza; ayuda a liberar serotonina que a su vez ayuda a aliviar el estrés y la depresión; mejora la respiración gracias al aire fresco de la playa; quema más calorías en menos tiempo; es un rehabilitador ideal ejercicio; Respetar las articulaciones, porque el impacto sobre la arena es mucho menor que el impacto sobre el asfalto; mejor equilibrio y estabilidad. Sin embargo, Christina Adelion señala que “hay que tener en cuenta que nuestro cuerpo tiene que adaptarse a la inestabilidad de la arena de la playa, por lo que el esfuerzo será mayor y puede aumentar el riesgo de lesiones, sobre todo en las piernas”. «.
Por otro lado, si una persona decide participar en deportes acuáticos, el experto recomienda “inscribirse en un club o centro donde haya expertos que se especialicen en natación. A partir de ahí, aprenda la técnica correcta, porque su uso excesivo puede dañar a una persona.
De igual forma, el verano es la estación preferida para combatir el sedentarismo, caminar por la ciudad y mantenerse en forma, porque “caminar es un ejercicio aeróbico muy beneficioso, ya sea para la edad, quema calorías, mejora la salud cardiovascular y respiratoria, calidad de vida”. sueño y estado de ánimo”, recuerda el Col·legi de Fisioterapeutes de Catalunya en uno de sus vídeos para una vida mejor. Si optamos por hacer senderismo en los meses de verano, ¿cómo deben ser las zapatillas? “Se recomienda utilizar calzado cómodo, flexible y con sujeción, realizar itinerarios preprogramados, adaptarse a cada persona y evitar el uso de chanclas en la piscina o la playa. Sin embargo, en caso de viajes de larga distancia, también es recomendable consultar a un especialista como un pediatra”, explica el coordinador regional del campamento de Tarragona en el Col·legi de Fisioterapeutes de Catalunya.
De hecho, muchas personas aprovechan sus vacaciones para hacer el Camino de Santiago o hacer senderismo. Sea como sea, “es fundamental planificar una ruta con un especialista en deporte y actividad física que pueda asesorarnos y planificar una ruta personalizada según tu capacidad física”.
De manera similar, “si se presenta patología o trauma, los médicos y fisioterapeutas pueden ayudar a diseñar este programa”. lesión
En este sentido, en verano, las lesiones deportivas más comunes pueden estar relacionadas con el uso excesivo o sin una programación o supervisión previa durante la ejecución. A pesar de ello, pueden producirse lesiones dolorosas (inevitables), aunque no se limitan al verano.
Ahora que ya sabes todo lo que tienes que saber sobre mantenerte en forma, incluso con el calor del verano, recuerda que gracias a la gama de productos con efecto frío de Lidergrip podrás refrescarte y prevenir esas lesiones que tanto te fastidian las vacaciones.